Festival de goles, ocasiones, nervios y emoción. Todo lo NO
necesario y menos recomendado para amarrar uno 3 puntos, que eran vitales ante
un rival inferior y que está llamado a jugar en los puestos de peligro.
Esta vez fue el más que necesario orgullo, para nivelar la
enésima caraja, que permitió el sonrojante y momentáneo 0-2. Tuvo que ser Álex
Alegría (cuentan las lenguas antiguas que de los Bermejales nunca sale
nada...), para poner el 2-2 con un doblete que bienvenido sea, pero que a la
postre fue insuficiente, después de que se marraran clamorosas ocasiones
(manque atracos arbitrales) que hubiesen dejado 2 puntos más que obligados.
Pónganse las pilas y no dejen escapar estos puntos, que a la
postre son los que deciden entre la mediocridad y el inconformismo.
ECHENLE HUEVOS...
ECHENLE HUEVOS...
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